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Glorioso 1 - Villarreal 0: Notas personales tras el partido

18/2/2003 - 00:00 - Enviada por fidel
¡Qué importante la victoria ante el Villarreal! Uno no le pide al equipo que gane, sino que pelee y que la actitud sea la máxima, pero de vez en cuando el resultado se convierte en un fin necesario. El equipo se había puesto en una situación muy delicada, sobre todo por la imagen ofrecida ante Osasuna, Rayo y Racing. La victoria da tranquilidad en la tabla y la forma en que el equipo jugó el partido apacigua también el espíritu. No fue un partido para entusiasmar, pero se apreciaron algunos cambios que, si se confirman, nos pueden mover al optimismo.

¿Qué ha sucedido en los siete días entre el desastre del Sardinero y el partido ante el Villarreal? Por ejemplo, el equipo ha estado en Bugedo. La falta de unión entre los miembros de un colectivo no es excusa para no dar el máximo de uno mismo en el trabajo, pero viene bien el que el equipo esté cohesionado y, al menos desde el punto de vista profesional, comparta objetivos y voluntades. Bugedo puede haber ayudado a aclarar algunas ideas al respecto. La imagen del banquillo de pie en los últimos minutos del choque, cuando las fuerzas convencionales fallaban y había que recurrir a la Vitamina C para rematar el partido es algo reconfortante.

Han pasado más cosas, que pueden ser anécdotas o puntas de iceberg. Mané tuvo a bien acudir a petición propia a hablar con los medios para hablar sobre temas relacionados con el equipo. Está bien saber qué piensa el máximo responsable técnico. ¿Es el inicio de un cambio de actitud hacia el entorno más próximo?, ¿es un síntoma de que también el técnico se ha puesto las pilas? Sea como fuere, es también reconfortante ver que Mané explica algunas cosas, porque su punto de vista interesa, y si lo conocemos podremos comprender mejor todo lo que rodea al equipo y no tendremos que quedarnos con las constantes acusaciones al empedrado que en nada contribuían a la tranquilidad.

Sobre el campo también hubo cambios. Por fin vimos a los dos delanteros centro natos de este equipo jugar juntos muchos minutos. Aparte de la estética de la situación, las virtudes de tener dos hombres delante parecen evidentes: se inicia el trabajo de presión en serio más arriba, se dosifican mejor los esfuerzos del grupo, se hace un equipo menos predecible y aparecen alternativas tácticas interesantes: el error de la defensa del Villarreal en el gol de Tomic fue provocado en parte por los movimientos con y sin balón de los puntas.

Vimos también a Edu Alonso en una posición más adelantada, bien coordinado con Geli. Y vimos un doble pivote sólido, con Helguera en crecimiento y Tomic asumiendo el mando del equipo. El serbio está bastante mejor de lo que pensaba que podría estar tras año y medio sin jugar. Ha venido con ganas, y su actitud parece que ha puesto las pilas -o en evidencia, según se quiera ver- al resto del equipo. El caso es que su presencia en el equipo coincidió con el renacimiento del Alavés rocoso que planta cara al rival, se muestra seguro atrás y aprovecha sus ocasiones, que es lo que vimos el domingo.

Ahora queda ver si la mejora en actitud -es que se me remueven las entrañas cada vez que pienso que este equipo ha podido tener "problemas de actitud"- se confirma. Vienen buenos partidos para chequear el espíritu albiazul. Ante los equipos de arriba la garra es un factor que iguala, y el reto de jugar ante los líderes tiene que ser un aliciente más para reforzar la "actitud". Con el colchón de puntos en la tabla, las urgencias clasificatorias son menores, así que nos toca relajarnos y disfrutar de nuestro equipo, si éste quiere.

P.S. Todo el apoyo del mundo para quien llegó al equipo en Segunda y ha paseado los colores del Glorioso por Europa y por los puestos más altos de la Liga. Espero que Téllez vuelva a ser en breve el gran jugador que hemos conocido.