Alavés 2 - Salamanca 1: Media hora de calidad sirve para lograr la tercera remontada consecutiva

En un alarde de mentalidad ganadora, el Deportivo Alavés consiguió este sábado su tercera remontada consecutiva, batiendo por dos tantos a uno a una Unión Deportiva Salamanca que dominó el choque durante la primera hora del mismo, pero que tras el gol de Arpón que les ponía en ventaja se vio desarbolada por el juego y las ocasiones creadas por los albiazules, que acabaron llevándose un partido que tuvieron muy complicado por juego y marcador.

El Alavés salió al campo con novedades en el once. Téllez quedó fuera, pasando Coromina al eje de la zaga con Sarriegi, mientras que el recuperado Edu Alonso entró por banda derecha. En el medio, Papa Sarr y David Sánchez repetían como doble pivote, tras el éxito de Eibar.

El conjunto salmantino avisó pronto. En medio del desorden albiazul, Gorka Brit se encontró solo ante Bonano y cruzó en exceso la pelota. Era el primer minuto y el preludio de lo que iba a ser una primera mitad en la que las ocasiones -larguero incluido- iban a venir del lado charro, ante un Alavés excesivamente estático. Tan solo al final de esta primera mitad los de Cos consiguieron acercarse ocn cierto peligro al área helmántica. Se pidió penalti en una internada de David Sánchez, cuando el balón fue arrastrado por un defensa lanzado al corte, que se llevó con el brazo el esférico.

Tras la reanudación, el juego siguió las mismas pautas. Cos dio entrada en el descanso a Carpintero por David Sánchez, desdibujado en su debut en Mendizorroza. La entrada del leonés apenas varió el que parecía ser el sino albiazul en su duelo ante uno de los equipos de la zona baja. Los charros siguieron creando más peligro que los albiazules, y al cuarto de hora de la reanudación, un disparo cruzado del Arpón desde el borde el área batía a Bonano, para desesperación de Mendizorroza.

Sin embargo, el gol visitante conectó el interruptor del juego gasteiztarra, y durante la media hora final llegó un auténtico rosario de ocasiones locales. Un cabezazo al largero de Sarriegi abrió el recital que no cristalizó hasta el minuto 85, cuando Bodipo remató a placer un centro de Carpintero. El Alavés siguió buscando, en pleno descuento, y en medio de un partido metido en brusquedades por la permisividad del colegiado, el tanto que sirviese para dar la vuelta por tercera jornada consecutiva al marcador, y lo acabó consiguiendo al aprovechar Rubén Navarro una indecisión del meta Tom ya en el tiempo de prolongación. La alegría de seguidores, jugadores y banquillo albiazules era pareja a la cara de circunstancias con la que desde el lado salmantino se veía cómo se esfumaban los puntos que estuvieron en sus manos.

Con esta victoria, los de Cos siguen poniendo presión a los demás equipos que luchan por hacerse con una plaza de las que se premian con el ascenso a final de campaña. Son cuatro ya las victorias consecutivas, tres de ellas con remontada, en lo que está siendo, sin levantar la voz, un auténtico golpe de autoridad albiazul en este inicio de la recta final de campeonato.