Informaciones sobre el Deportivo Alavés

Nàstic 1 - Glorioso 0: Contra ausencias propias y decisiones extrañas

05/6/2005 - 04:27 - Enviada por fidel

El ascenso deberá esperar. En un partido intenso celebrado en el Camp Nou de Tarragona, el Deportivo Alavés acabó perdiendo tras encajar un tanto en el descuento de un tiro raso lejano chutado por un Iván Ania fresco cubierto en teoría por otro recién entrado Papa Sarr, que parecía que Bonano podría haber atajado sin problemas pero que, incomprensiblemente, acabó en el fondo de la red. Fue un jarro de agua fría para los casi mil seguidores gasteiztarras que se acercaron a la capital tarraconense.

Ese gol postrero fue la guinda a un partido en el que el Deportivo Alavés careció durante muchos minutos de una referencia ofensiva -pesaron mucho las bajas de Bodipo y Rubén Navarro- y en el que el colegiado Rodado Rodríguez despertó las iras de la expedición gasteiztarra por la rigurosa expulsióna Coromina y por su insistencia en impedir el acceso de los camilleros con Edu Alonso caído en su propia área, lo que se acabó convirtiendo en reparto de tarjetas a jugadores y auxiliares albiazules.

Cos puso en liza un once con una delantera rehecha a base de colocar a Nené en punta con David Sánchez de enganche. Edu Alonso por banda derecha y De Lucas por la izquierda completaban el cuarteto ofensivo albiazul, con Astudillo y Carpintero en la medular. Esta disposición no funcionó: Nené no acertaba a ser una referencia válida en punta, y David Sánchez hacía aguas a la hora de contener y no contribuía a crear peligro.

La rigurosísima expulsión de Coromina a diez minutos para el descanso terminó por desmontar el sistema albiazul: obligado por la inferioridad numérica, el Alavés apareció en la segunda mitad con Epitié en punta, con Nené y De Lucas por bandas, y Edu Alonso retrasado al lateral derecho. Con esta nueva disposición, el Glorioso creó más peligro con un hombre menos que en la primera mitad. Epitié llegó a tener controlado un balón dentro del área, que no acertó a rematar, y ante un Nàstic apagado, De Lucas se llevó por velocidad un balón por banda derecha, que acabó centrando, ya en el área, a Carpintero, quien solo ante Valencia no consiguió batir al meta tarraconense.

Faltaban diez minutos para el final y parecía que cada equipo se iba a llevar un punto de una contienda muy igualada. Sin embargo, ya en el descuento, Iván Anía conseguía hacerse con un balón pegado a banda en la zona media del campo albiazul, ante la pasividad de Sarr, y su remate, raso, acabó en la red en un tremendo error de un Bonano que llegó sobrado al balón pero que no consiguió desviar. Era el peor jarro de agua fría para un equipo soliviantado por una labor arbitral extraña, que había provacado el desconcierto en ambos equipos cuando pocos minutos antes el colegiado se empeñó en impedir el acceso al campo de los auxiliares albiazules pese a que Edu Alonso se encontraba tendido en el suelo en su propia área, y pese a la insistencia de ambos equipos en enviar la pelota fuera.

Con esta derrota, y la consiguiente decepción de la expedición albiazul -mil personas desplazadas hasta Tarragona- el Deportivo Alavés dejó pasar una buena ocasión para dejar sentenciado su paso a Primera División. Ahora quedan dos opciones más, Elche y Sporting, pero queda también la duda de si el equipo podrá sobreponerse a las ausencias de alguno de sus hombres claves en estos partidos y a la "mano negra" que parece acompañarle en forma de decisiones arbitrales desconcertantes en los últimos partidos.