Informaciones sobre el Deportivo Alavés

UNA MENTIRA: FÚTBOL Y EMPRESA

07/2/2001 - 14:33 - Enviada por Raúl Alústiza
Y algunas más:
El dueño de cualquier empresa, (ejplo. Michelín) exige resultados en
función de unas posibilidades, pero nunca se le ocurriría decir como
deben ser las ruedas, para eso están los ingenieros, técnicos,... en el fútbol si, aquí “el dueño” es capaz de decir que las quiere cuadradas, que corran mucho, y que se vendan el doble. Así, vemos fichajes disparatados, jugadores que no valen lo que cuestan, objetivos deportivos “sin pies ni cabeza”, quieren fabricar jugadores, sin inversiones sin asesores, sin instalaciones etc., etc.
A propósito de instalaciones, “otra mentira”: ¿En que empresa seria, que lleve más o menos 75 años de existencia, con 3, 4,5, 6... mil millones de presupuesto, no tiene unas instalaciones donde “fabricar el producto?”, sin ir muy lejos, El Alavés. Con “la ciudad deportiva”, es difícil creer en proyectos o inversiones empresariales a largo plazo (cantera), si para preparar el próximo partido, no tiene algo en
condiciones. “La casa por el tejado”.

Otra: la investigación es algo fundamental en cualquier empresa, para
eso existen un grupo de expertos, técnicos, etc., aquí no, “es que en el fútbol esta todo inventado”, argumento de los muchos “vividores”
alrededor de esto, que no les interesa que se mueva nada, por si
acaso... Luego el equipo no rinde, “claro es que no corren”, análisis
científico de los expertos. Claro, estos todavía no han caído en cuenta que “al fútbol no se juega por lo que se corre sino por lo que se sabe”.

Otra: cuando hay que llevar la gente al campo, apelamos a los
sentimientos, colores, símbolos..., pero cuando hay que subir los
precios..., “no, es que esto es una empresa, un negocio y...”
A propósito de negocio, en que empresa que en la temporada de mayor
éxito deportivo pierde 2, 3,... mil socios, y “el dueño” no dice “ni
mu”. Pero si al entrenador (Mané) se le ocurre perder 4 partidos
seguidos, “el dueño” seguro que aparece diciendo: “hay que tomar
medidas”, aunque los resultados estén dentro de la lógica deportiva que está muy por encima de la empresarial, pero hay que buscar culpables.

Una más: si el “Crak”, la figura (Figo), cambia de empresa, apelamos a
los sentimientos, a “La camiseta”, a la traición... Pero cuando la
“Empresa-Club” se deshace todas las temporadas de 6, 8... jugadores,
jugadores que darían la vida por el Club, entonces no, “es que son
profesionales y La empresa no puede andar en miramientos”.
Hablando de profesionales y sentimientos. Estas “Empresas” se empeñan en exigir a los profesionales, cariño, amor por los colores etc. Pero
¿desde cuando se pueden comprar los sentimientos?. Al profesional hay
que exigirle máxima dedicación a su profesión y respeto por El club, que los sentimientos y el cariño ya aparecerán si se lo han ganado
mutuamente.

Otra: en toda producción hay un proceso de elaboración, mantenimiento,
limpieza, descanso, reparaciones..., para sacar el máximo rendimiento.
Aquí no, aquí los ciclos vitales de la maquinaria (HUMANA) no deben
existir. Luego el equipo no rinde, “es que son unos vagos, hay que
darles caña”. Gran error, gran mentira.

Por último, que me explique que empresa con ingredientes tan dispares
puede producir algo: Intereses deportivos, económicos propios y
paralelos, políticos, de los medios de comunicación, de la afición,
etc., si además añadimos factores como: sentimentalismos, pasiones
desmedidas, presión del entorno, circustáncias del juego (la
casualidad), la suerte, errores arbitrales, inversiones deportivas, (la cantera, la formación de jugadores), y en medio de “la producción”: “la maquinaria”, los jugadores, que alguno se le olvida que son HUMANOS Lo que yo pienso de esto, es que en este negocio el que de veras debe de ganar es EL FÚTBOL, EL JUEGO, porque así ganamos todos, ya que el espectáculo estará asegurado y las ganancias también, aunque alguno siempre tenga que ser el último.