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Athletic-Glorioso: Notas sobre el choque y el rival

25/4/2001 - 07:32 - Enviada por Mikel Sagarduy
El Ath. de Bilbao - Deportivo Alavés será uno oda al santoral. Todo un derbi San Prudencio vs. San Mamés. Además el escenario acompaña. En Mendizorrotza no hubiera sido lo mismo, pero San Mamés es el camposanto perfecto: mucho muerto viviente, mucho, pero que mucho resucitado y también algún alma en pena que otra por los banquillos y el césped, amén de los consabidos fantasmas como Elejalde.

Para el Ath. De Bilbao es uno de los dos partidos importantes que le quedan en lo que resta de temporada (el otro es ante la Real Sociedad). Tras fracasar en los objetivos marcados para esta temporada (ganar la Copa y clasificarse para disputar la UEFA) sus esfuerzos pronto se centraron en la lucha por la permanencia y en ella todavía andan sumergidos, aunque prácticamente se puede decir que seguirán otra temporada más en Primera. Con la salvación virtual en la mano el fracaso de Rojo y los suyos se vería mitigado si son capaces de derrotar al equipo revelación de Europa.

Por todo ello, en Bilbao preparan el choque a conciencia tratando de recuperar precipitadamente a hombres lesionados como Guerrero o J. González, que harán todo lo posible para estar a punto para la cita. En la grada seguro que habrá también más seguidores que los escasos 10.000 que acudieron contra el Espanyol hace quince días.

En el aspecto meramente deportivo, tanto Larrazábal como Rios causarán baja uno por sanción y el otro por lesión y a estas dos se unirán a las de Urzaiz, Alkorta, Urrutia y Etxeberria. El que sí estará será C. García que reapareció en Vallecas el domingo anterior. Curiosamente el último partido que disputó fue contra el Glorioso, además marcando un gol celebrado con mucha rabia, aquel famoso día del "maletín" valenciano.

El posible once puede ser el formado por: Lafuente_; Lacruz, C. García, Vales, Guréndez; Orbaiz, Alkiza_; iko, Guerrero, Yeste o J.González y Ezquerro.

El juego rojiblanco será previsiblemente el habitual, con pelotazos arriba buscando la rapidez de Ezquerro y, sobre todo, las jugadas a balón parado que C. García se encargará de rematar.